lunes, 5 de abril de 2010

El Card. Bergoglio lavó los pies de doce internos del penal del Borda

Buenos Aires, 5 Abr. 10 Fuente: AICA

Cardenal Jorge Mario Bergoglio, realizó el tradicional lavatorio de pies a doce internos del Hospital Borda

El arzobispo de Buenos Aires y primado de la Argentina, cardenal Jorge Mario Bergoglio, realizó este Jueves Santo el tradicional lavatorio de pies a doce internos de la Unidad Penitenciaria Nº 20, del Hospital Psicoasistencial José Tiburcio Borda, repitiendo el gesto que Jesucristo tuvo con los discípulos en la Ultima Cena.
El purpurado porteño llegó poco antes a las 16 hasta el penal, ubicado en el barrio porteño de Constitución, para celebrar en la capilla la misa de la Cena del Señor junto a los reclusos y personal carcelario, y cumplir el mandato evangélico de visitar a quienes están en prisión.
Antes de la comunión, el cardenal Bergoglio se arrodilló delante de cada uno de los 12 internos -preparados durante meses para esta ceremonia mediante una catequesis especial- para lavarle los pies y besárselos, expresando así, según dijo, su "projimidad" con quienes están en prisión o padecen situaciones de dolor.

La mayoría de los cien internos son considerados inimputables por la justicia o condenados por problemas psicológicos.
Al salir del penal, el cardenal Bergoglio contó que "pidió a Jesús que acompañe a estos internos en su dolor. Les lavé los pies y ellos respondieron con gran religiosidad".
Cultura del diálogo y Malvinas
Tras participar de la celebración eucarística, el arzobispo dialogó con la prensa afuera del penal, donde alentó a fomentar la "cultura del encuentro frente a todo tipo de desencuentro en todos lados".
"El diálogo es una cosa que nos hace bien a todos, aunque el diálogo es difícil porque presupone ponerse en el lugar del otro y dar pequeños pasos de un lado hacia el otro por el encuentro. Todo diálogo tiene que configurar un encuentro", subrayó.
El cardenal Bergoglio también recordó a quienes "regaron con su sangre el suelo argentino" durante la Guerra de las Malvinas, y pidió que el tiempo "no haga olvidar" a los caídos en aquella confrontación bélica.
"No perdamos el recuerdo. En el encuentro la reconciliación es justa, las Malvinas son nuestras", aseguró.

Antecedentes
El cardenal Bergoglio viene repitiendo esta práctica, que recrea el "gesto servicial" de Jesús en la Ultima Cena, desde que asumió el gobierno pastoral de esta jurisdicción eclesiástica en febrero de 1998.
Desde entonces, el primado visitó sucesivamente a los afectados por el sida en el Hospital Muñiz, a los presos de la cárcel de Villa Devoto, a la gente alojada en el Hogar San José, a enfermos con padecimientos crónicos del Hospital de Niños Ricardo Gutiérrez, y a los internados en el Hospital Tornú.
También las madres primerizas en la Maternidad Sardá, a los adolescentes provenientes de la villa 21-24 y del Barrio Zabaleta que "están superando el flagelo de la droga" el Centro de Día San Alberto Hurtado, que funciona en la parroquia Virgen de Luján, del barrio porteño de Parque Patricios, y a niños con padecimiento terminales del hospital pediátrico "Juan Garrahan".